
Preparando los habíos
A poco de que febrero comience a vestirse de fiesta, con todo lo que trae este loco desvarío, uno no puede evitar mirar atrás. Y al mirar, entre las luces y los ecos, recordar cómo esta bendita locura se coló en mi vida para quedarse. No sabría decirte cuándo comenzó, pero el porqué lo tengo…